Solo vívelo

No sabría como definir o expresar los últimos días de mi vida, es sencillamente indescriptible. Ni siquiera se describir con palabras, lo cual pensé que nunca me pasaría, lo que verdaderamente estoy sintiendo.

Soy de esas personas que nunca ha sufrido por amor, no no, no me refiero a que nunca haya tenido relaciones o amores, no quiero decir que nunca he llorado por amor o desamor, al contrario, lo he hecho en multitud de ocasiones, sin embargo, esto... 

Pasan los minutos, las horas, los días y solo puedo pensar en él. No se que me pasa, no lo comprendo, no puedo entenderlo, no soy capaz de centrar mis pensamientos en nada más. Incluso en las situaciones más cotidianas de la vida mis pensamientos se desprenden de mi control, me rehuyen y se escapan para poder soñar despierto todo esto que no se describir. 

Soy una persona nerviosa y a la vez despreocupada con las cosas de la vida hasta el punto que me tomo muy pocas cosas verdaderamente en serio, no soy capaz de darle importancia a cosas que el resto del mundo vería como un problema de enormes dimensiones, y sin embargo ahora...

Cuando empece a notar los síntomas de tan extraña dolencia comencé a hacerme las típicas preguntas para intentar comprender una mínima parte de todo esto; ¿qué es esto que estoy sintiendo? ¿es un capricho o algo más? ¿realmente no puedo controlar estos sentimientos? ¿qué van a suponer en mi vida? ¿no tengo elección? ¿se acabó el vivir sin sufrir? ¿me estoy enamorando?

El resultado de esta acción fue estar más confusa si cabe. A día de hoy, con una mezcla de miedo, desconcierto e  incertidumbre solo he llegado a una conclusión que mi propio subconsciente me ha dado y a la cual prefería no haber llegado: es el momento de sentir y todo lo que pase a partir de este momento no lo podrás controlar, así que solo vívelo.

Comenzando a sentir cosas

Ese momento en que empiezas a ver las cosas de otro modo, en que empiezas a escuchar sus frases con un matiz distinto, cuando ves que todo lo que te dice tu cabeza lo rememora una y otra vez dándole uno y mil significados, cuando no eres capaz de pensar racionalmente, cuando actúas por estímulo-reacción sin pensar, cuando te pasas el día mirando el móvil esperando un misero hola o adiós solo para asegurarte de que se acuerda de ti, ese momento en el que sientes un vacío enorme cuando te paras a pensar en que él podría no sentir lo mismo, cuando te imaginas las cosas y cosas que le dirías y las palabras que le susurrarías en las miles de noches que te imaginas con él, cuando solo cuando hablas con él sonríes de verdad, cuando solo esperas que él esté ahí, que te mire, que sonría y que te sostenga la mirada, cuando solo puedes soñar y pensar en él hasta el punto de que empieza a dolerte.. de un día para otro todo cambió y empiezas a sentir y a darte cuenta que esa torre en la vivías desde hace tiempo, esa muralla impenetrable que te habías construido está empezando a tener grietas, a abrirse huecos poco a poco y no sabes como parar lo que se avecina, lo que tú sabes que te espera y frente a lo cual tienes sentimientos controvertidos... quiero sentir, enamorarme, sentir mariposas en el estómago, volar con cada palabra y cada beso.... pero, y si todo esto no va a tener un final feliz, y si él no siente todas estas cosas y si aunque lo sienta las cosas no salen como querríamos, y si, y si , y sii..

incertidumbre, incongruencia, miedo, nervios, impaciencia... demasiados sentimientos juntos de los cuales solo tengo seguridad de su origen, empiezo a enamorarme.

Pequeños errores

¿Sabes cuales son esos momentos en los que sabes que acabas de meter la pata hasta el fondo, que quieres que te trague la tierra y sientes la mayor vergüenza del mundo por la torpeza de tus actos?pues yo lo sufro constantemente

Si, soy de esas personas que hablo sin pensar, que hago las cosas y luego me doy cuenta del error que he cometido y que ya solo queda esperar la respuesta de la otra persona a ese gran fallo tuyo. Muchas veces cuando me pasan este tipo de cosas, he de decir que demasiado a menudo, es en ese momento cuando me para a pensar en la cara de las otras personas cuando escuchan eso que acabo de decir o cuando ven eso que acabo de escribir, ¿ qué pensarán?. En la mayoría de las ocasiones hay dos opciones, que hagan pasar por encima tu error, como si fuese un error humano cualquiera, sin darle mayor importancia, y por otro lado pueden tomar la segunda opción, esa que verdaderamente me preocupa, mofándose del mismo, haciendo gracias, poniéndote tensa y por supuesto dándole la importancia que tú en este momento mientras lo estás pensando le estás dando.

En el momento en el que me encuentro, a la espera de esa respuesta a mi error siento una mezcla de miedo y vergüenza junto con una especie de compasión por mi misma. Creo, más por la cantidad de veces que me ha pasado que por la gravedad de las mismas que irremediablemente mi vida va a estar llena de este tipo de errores, de este tipo de fallos, de esos sencillos y sin importancia pero de los que sufres quizá más que los importantes aunque su duración suela ser corta. No se qué pasa conmigo, no se si es mi pasotismo habitual, mi personalidad nerviosa o mi poco cariño a la reflexión por la que me pasan estas cosas, pero eso si, he llegado a una conclusión definitiva: voy a seguir cometiendo fallos durante toda mi vida, es irremediable, así que lo único que me queda es sonreír, disfrutar y no darle importancia a cosas que en realidad no la tienen.

Pasar de página

¿Qué implica pasar de página? 

En los últimos días he leído diversas entradas sobre el mismo tema definidos de diversas formas: ¿cómo pasar de página?, formas de olvidar, la otra cara de la moneda y otros mucho los cuales ya ni recuerdo. Tras leer, releer y volver a leer páginas y páginas sobre el mismo tema he llegado a la conclusión de que "nadie debería pasa de página".

A esta conclusión tan a simple vista imposible o deprimente he de decir que a mi personalmente me reconforta. Lo que quiero decir con todo esto no es que las historias no pasen, que los amores siempre sean los mismos o el tópico de "el primer amor nunca se olvida", muy al contrario creo que todos olvidamos, que las historias pasan, las personas vamos de una relación a otra muchas veces casi sin darnos cuenta e incluso en muchas ocasiones ni siquiera existen esas relaciones a las que aferrarnos o que puedan implicar una añoranza.

Lo que quiero decir con todo eso, no se si con mucho acierto, es que si bien cada uno de nosotros nos enamoramos y nos desenamoramos a veces con facilidad y otras en cambio con una dificultad asombrosa al final todos nos decimos a nosotros mismos que todo pasa y que todo llega, que siempre hay un roto para un descosido, que todos tenemos nuestra media naranja, que lo importante es pasar página, que no importa lo que haya durado esa página que al final se acaba olvidando y multitud de frases más alentadoras intentando hacernos creer y convenciéndonos a nosotros mismos que siempre habrá una página más de ese libro de historias para cerrar esa página anterior que queremos olvidar. 

Pues ahí esta la cuestión, ¿es posible cerrar todas esas páginas? yo sinceramente creo que no, o por lo menos no de un modo tan radical como tenemos idealizado. Hay libros en los que las páginas pasadas reaparecen cada cierto tiempo para releerse, hay otros que siempre tienen diversas páginas abiertas, muchas veces por desconfianza, ambición o añoranza, otros son esos libros que solo tienen una o dos páginas pero son páginas con mucho escrito, con mucho a lo que de vez en cuando esas personas acuden cuando nada en la pagina actual tiene sentido o cuando teniéndolo necesitan recordar los buenos momentos de páginas pasadas. Y, ¿ qué pasa con esos libros que intentan cerrar la página anterior tan rápido y con tanta fuerza que no saben ni que hacen en la pagina actual? yo sobre todo me refiero a estos, a esos amantes fervientes que viven cada relación como si de una cruz se tratase y cuando terminan es como si el mundo se acabara, todo se cerrara y solo pensaran en una nueva página, una que abra una nueva historia y les haga olvidar la anterior, ¿en serio creen que por cerrar con candado y a toda velocidad esa página no va a aparecer nunca más?  al contrario, por mucho que les duela o por mucho que intenten negarlo esas paginas, las que duelen, las que más sentimos, las que nos hacen estremecernos, llorar, y por nada del mundo queremos recordar son las que en realidad en el futuro más vamos a abrir y ojear para ver que pasó, que ha pasado, como ocurrió todo,  que sentimos o que estamos sintiendo.

Después de todo esto me planteo, ¿Tan importante son las paginas? ¿tan importante es cerrar una y abrir otra? ¿por qué no intentamos simplemente vivir sin preocuparnos tanto en las paginas y simplemente sentir cada una de las mismas? muchas veces intentamos olvidar algo o iniciar algo nuevo simplemente por ese afán de no sentir, pero es que en eso consiste el libro, ¿si no lloramos como vamos a amar?¿si no añoramos como vamos a soñar?,  ¿si no sentimos como vamos a vivir?.

Escribir sin pensar

No les cuentes todo lo que fuimos, no digas ni una palabra de lo que vivimos ni de lo que soñamos juntos, déjalo todo en los recuerdos, pero solo eso, nuestros recuerdos.

Cada día que pasa pienso que todo lo que vivimos, pensamos, recordamos e imaginamos juntos, fue eso, nuestro y por tanto no entiendo ni llego a comprender que puedas querer mostrárselo a otras personas, como un trofeo o una medalla, o incluso como una mala experiencia.

¿qué entiendes por una vida juntos? es eso juntos, no implica que incluyas ahí comentarios mofosos, hirientes y sin conocimiento de razón ni causa que ni a ti ni a mi ni a nuestros recuerdos le interesan. ¿ no entiendes que ni los propios recuerdos quieren que lo airees? son eso recuerdos, tuyos, míos  de quienes aparecieron en esa historia, de quienes estaban ahí presentes cuando ocurrió, solo de los ojos y los sentimientos de las personas que fueron partícipes.

por eso repito, por si la repetición hace que captes lo que quiero decir, que lo mio y es mio y lo tuyo tuyo, y cada uno es dueño de su vida y sus recuerdos, pero en cambio lo nuestro es nuestro, es decir, puedes hacer partícipe de tus propias vivencias, memorias o secretos a quien consideres que es apto y se merece escucharlas, comentarlas o criticarlas si quieres, pero las nuestras, las que son consecuencia de la acción conjunta de dos personas, y mas cuando implican un grado de intimidad grande, cuando solo incumben a esas dos personas, es cuando debes darte cuenta, no solo porque yo ahora te lo este repitiendo hasta la saciedad, sino por simple conciencia moral y social que son NUESTROS, si, lo que implica esa palabra es lo único a lo que debes atenerte, TU y YO.

Aunque sea del pasado, aunque ya no pertenezca a la realidad sino a meros recuerdos y añoranzas son propiedad exclusiva nuestra y de nuestra voluntad, y por supuesto, por si no había quedado todavía claro, te diré que no doy ni daré nunca mi consentimiento para que todo eso esté expuesto fuera de nosotros.