domingo, 24 de febrero de 2013

Distinta?

y si soy distinta? ni yo misma se como he llegado a hacerme esta pregunta.
 
me gustaría decir que me encanta ser diferente, distinta, pensar y sentir cosas que no siente el común de las personas, o por lo menos no las personas de mi edad y en circunstancias similares, sin embargo he de decir que en días como hoy, cuando seriamnete me planteo esta pregunta tengo que admitir que me da miedo intentar responderla y llegar a la respuesta.
 
Me gusta soñar con un mundo distitno, una vida distinta,  unos intereses y sueños distintos, incluso he llegado a decir que me gustaría cambiar mi vida al completo, ser totalmnete diferente de como soy ahora. Sin embargo parándome a pensar lo que eso conlleva, las consecuencias reales que un pensamiento y un sueño así pueden tener en mi vida y en mi, me doy cuenta y despierto de ese sueño con el convencimiento de que no es lo que quiero, pero y si si lo es?
 
Si, es cierto, me gusta lo raro, lo diferente, lo atrevido, me atrae lo que no es lo convenido, lo dificil y me gusta pensar en mi vida como algo distinto de lo general. Amo el riesgo, lo inesperado, lo que no está socialmente aceptado, lo que no conozco. No me gusta lo predestinado, no me gusta pensar, sentir y vvir como todos lo hacen, no me gusta la monotonía de la vida actual, no me gusta senir que todos los días son iguales y no hacer nada fuera de lo común y lo que no me gusta por encima de todo es vivir como todos esperan que viva.
 
Pero mi pregunta es,  voy a ser capaz de luchar contra todo por lo que realmente quiero y a ser capaz de ser feliz en caso de no conseguirlo o sin embargo, me gusta hasta tal punto que voy a esperar siempre más de mi vida y no voy a se capaz de vivirla?

domingo, 17 de febrero de 2013

Búsqueda de soluciones


En momentos como este, cuando todo está bloqueado, cuando veo que ninguna somos lo que eramos, que ninguna ve la salida, la solución, ni siquiera él, el que nos guía es capaz de hacernos llegar a tierra firme he decido intentar encontrar el problema y a continuación la solución.

 Empezamos con pie firme, solido, fuerte, casi sería capaz de decir que teníamos seguridad absoluta en nosotras, en lo que somos y en lo que íbamos a conseguir. En esos primeros momentos, esos primeros partidos, esos primeros contactos de principio de temporada, nos sentíamos muy fuertes, tanto que llegamos a pensar que todo estaba hecho, que solo siendo nosotras mismas, estando juntas, luchando y jugando como sabemos, no de una en una, no de forma individual, sino juntas, como solo nosotras sabemos, apoyándonos, confiando plenamente en cada una de nosotras, porque sabíamos lo que valíamos y lo que queríamos conseguir a final de temporada, lo conseguiríamos, pero llegó el momento en que todo eso cambió, poco a poco fuimos perdiendo esa seguridad, las lesiones llegaron y con ello la desconfianza, el pesimismo, y la tristeza en nuestro propio juego.

Nunca pensé que podría llegar un momento en esta temporada, que se presentaba como quizá la definitiva, en la que conseguiríamos demostrar lo que somos, lo que nos merecemos, en las que después de un comienzo tan perfecto como el que tuvimos, acabemos poco a poco derrotadas por nosotras mismas, por nuestros miedos. Esos partidos en los que las jugadas salían solas, en las que sabíamos donde estábamos cada una, donde confiábamos ciegamente en nosotras solo mirándonos, y que ahora hayan pasado a ser partidos en los que nada sale, nos sentimos fuera, ya no somos un equipo, nos sentimos derrotadas y lo que es peor, ya no disfrutamos jugando, ya no sonreímos, estamos…. tristes.

Hemos llegado al peor punto de un equipo, al final, a donde todo es negro, y ahora en este instante, hago un llamamiento a nosotras mismas, a nuestro orgullo por este equipo, por nosotras y lo más importante al amor por este deporte, para salir adelante, para ser capaz de demostrar  lo que valemos, que no somos una, ni dos, ni tres jugadoras buenas que guían a una rebaño de jugadoras mediocres, somos un EQUIPO, en el que todas, y repito todas, somos las mejores, y no me refiero a ser las mejores técnicamente, ni físicamente, ni tenemos mil medallas que enseñar, todo lo contrario, somos mas bien todas esas jugadoras que ni fu ni fa, que en un equipo superior seriamos suplentes y solo saldríamos para permitir descansar a las buenas y que pasaríamos desapercibidas, pero en nuestro equipo, en este  que hemos hecho nosotras mismas, poco a poco, estamos las personas necesarias y perfectas para llegar a donde nos lo propongamos, porque confiamos en nosotras, porque jugamos unidas, porque sabemos cuando una está mal e intentamos animarla, porque no solo somos amigas en el juego, somos amigas fuera y dentro de la cancha,  y lo más importante y por lo que yo creo que debemos sacar ese alma de ganadoras que todas llevamos dentro, es porque amamos este deporte, porque soñamos todo el año con ganar esta liga, con ser por fin las ganadoras, las que de verdad demuestran lo que son, las que estamos orgullosas de este equipo y de lo que hemos conseguidos, pero lo importante es que estamos orgullosas de nosotras, asi que tras esta reflexión os diré, que luchemos, que salgamos ahí, semana tras semana a demostrar quienes somos, a demostrar quién es FODEBA y porque amamos este deporte.